LA CONQUISTA BIZANTINA DE HISPANIA.

La conquista bizantina de Hispania es un episodio relativamente oscuro de la historia que a menudo se pasa por alto en favor de otros eventos más conocidos, como la invasión musulmana de la península ibérica. Sin embargo, la presencia y el dominio bizantinos en esta región durante un período crucial dejaron una marca indeleble en la historia de Hispania y en la historia de Bizancio.

Contexto Histórico

Para entender la conquista bizantina de Hispania, es esencial comprender el contexto histórico en el que tuvo lugar. En el siglo VI, el Imperio Romano de Occidente había caído, y la península ibérica se había convertido en un mosaico de reinos germánicos y autóctonos. En ese momento, el Imperio Romano de Oriente, heredero de el Imperio Romano, con su capital en Constantinopla, era la máxima potencia influyente en el mundo mediterráneo y tras haberse lanzado a la reconquista de Italia y en norte de África, puso sus ojos en Hispania..

Los Primeros Pasos de la Conquista

La conquista bizantina de Hispania comenzó en el año 552, cuando el emperador Justiniano I envió al general Liberio con un ejército a la península. Su objetivo principal era recuperar las provincias que habían sido ocupadas por los visigodos y establecer un control bizantino en la región. Liberio tuvo éxito en sus primeros intentos y logró restablecer la autoridad imperial en ciertas áreas del sureste de Hispania.

Ejércitos Empleados

Los ejércitos bizantinos que participaron en la conquista de Hispania estaban compuestos principalmente por soldados regulares del ejército imperial, así como por unidades auxiliares reclutadas localmente. Estos ejércitos emplearon tácticas y estrategias militares avanzadas de la época, incluyendo la ingeniería militar bizantina que contaba con onagros, balistas, catapultas etc. Su capacidad para mantener el control en una región tan disputada durante más de siete décadas es un testimonio de su habilidad militar.

Las Ciudades Principales bajo Dominio Bizantino

Durante su ocupación, los bizantinos establecieron una serie de ciudades clave en la península ibérica. La más destacada de ellas fue Cartagena, que se convirtió en la capital de la provincia bizantina de Spania. Otras ciudades importantes incluyeron Málaga, Almería y Elche. Estas ciudades sirvieron como centros de administración y comercio, y su influencia bizantina se reflejó en su arquitectura y cultura.

Desafíos y Conflictos.

La conquista bizantina de Hispania no fue un proceso sin dificultades. Los visigodos, que aún mantenían el control sobre gran parte de la península, resistieron tenazmente la expansión bizantina. Además, los conflictos internos en el Imperio bizantino, así como las presiones externas de los vándalos en África y los persas en Oriente, pusieron a prueba la capacidad de Bizancio para mantener sus posesiones en Hispania.

El Papel de los Hispano-Romanos

Un factor importante en la conquista bizantina fue el apoyo de la población hispano-romana. Muchos hispano-romanos vieron a los bizantinos como liberadores del yugo visigodo y apoyaron activamente su presencia en la península. Esto ayudó a consolidar el control bizantino en ciertas regiones.

Duración y retirada bizantina

La conquista bizantina de Hispania se extendió a lo largo de varias décadas, desde su inicio en 552 hasta su retirada definitiva en 624. Durante más de setenta años, los bizantinos mantuvieron una presencia en la península ibérica, aunque gradualmente perdieron territorio ante los visigodos y las amenazas musulmanas.

Legado de la Conquista bizantina

A pesar de su retirada en 624, la conquista bizantina de Hispania dejó un legado duradero. Las ciudades y fortificaciones que establecieron siguieron siendo importantes centros urbanos durante siglos. Además, la influencia cultural bizantina se mantuvo en la península ibérica, especialmente en áreas como la arquitectura y el arte. El conocimiento médico y científico bizantino también influyó en la región. La conquista bizantina de Hispania es un recordatorio de la complejidad y la riqueza de la historia de Europa y el Mediterráneo.

JOSÉ A. OLMOS GRACIA.

Policía local de profesión, desarrolla su cometido en la categoría de oficial en el municipio de Huesca, contando con casi 15 años de servicio y varias distinciones. A pesar de que su afán por la historia le viene desde pequeño, no fue hace mucho cuando se decidió a cursar estudios universitarios de Geografía e Historia en UNED y comenzar en el mundo de la divulgación a través de las redes sociales. Actualmente administra el blog elultimoromano.com así como páginas en Instagram y Facebook con el mismo nombre. Además, colabora con revistas, páginas, asociaciones, blogs, podcast y es miembro de Divulgadores de la Historia.
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BIBLIOGRAFÍA:


- Historia medieval. Ana Echevarría Arsuaga. Julián Donado Vara. EU Ramón Areces.

- Atlas histórico de la Edad Media. Ana Echevarría y José M. Rodríguez. EU Ramón Arec